5 October 2020

The writer Clara Fuertes chooses my illustration "Oblivion" as the cover of her upcoming book


Año 2020

Marzo fue el mes más extraño que he vivido nunca. Confinados, esa fue la palabra que marcó el mañana. El futuro de todos. Comenzó un encierro incierto con ventanas muy abiertas. Con aplausos por las tardes. Los meses se volvieron de plomo. El miedo se adueñó de los hogares. Yo ardía a través de los pinceles. Ellos aprendieron a ser mis alas. Me permitían volar más allá de las cuatro paredes de mi habitación. Me iba lejos, muy lejos, allí donde el alma siempre sabe descansar. Hice promesas. La primera, al bosque: «Volveré» le dije, «pero mientras tanto déjame hacerte un regalo».

Así nació esta ilustración, fue una ofrenda a la libertad de la primavera. La llamé Oblivion (Ilustración original creada en papel con acuarela y lápices de colores, 42 x 29,7 cms).

Mientras yo pintaba, mientras me perdía entre el follaje de los árboles y la tristeza, una escritora llamada Clara Fuertes hacía lo mismo con las palabras. Sus palabras hablaban de un río que fluía, el último río salvaje de España, el Ara.

Ninguna de las dos lo sabíamos todavía, pero el destino quiso que nos encontráramos. «Tu Oblivion es mi Siena», me dijo un día casi enamorada. Y unos meses más tarde, en el mes de octubre del año de la Pandemia, se convirtió en realidad la portada de su última novela:
“Me enamoró una lágrima”.

Hay espacios mágicos que viven entre el sueño y las manos. Espacios pasión. Espacios cauce. Espacios encuentro.

Cuando el deseo fluye, crea eternidades.

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Year 2020

March was the strangest month I have ever lived. Confined, that was the word that highlighted our tomorrow. The future of all of us. An uncertain confinement began with wide open windows. With applause every afternoon. The months turned to lead. Fear took over our homes. I burned myself through paint brushes. They learned to be my wings. They allowed me to fly beyond the four walls of my room. I could fly far, far away, where the soul always knows how to rest. I made promises. The first one, to the forest: "I'll be back" I said, "but in the meantime let me make you a gift."

This is how this illustration was born, it was an offering to the freedom of Spring. I called it Oblivion (Original illustration created on paper with watercolor and colored pencils, 42 x 29.7 cms).

While I was painting, while I was lost among the foliage of the trees and sadness, a writer named Clara Fuertes did the same with words. Her words spoke of a flowing river, the last wild river in Spain, the "Ara".

Neither of us knew yet, but fate would join us. "Your Oblivion is my Siena", she told me one day almost in love. And a few months later, in October, the cover of her latest novel became a reality:
"Me enamoró una lágrima".

There are magical spaces that live between sleep and hands. Passion spaces. Riverbed spaces. Meeting spaces.

When desire flows, it creates eternities.












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